El documento, titulado «Agenda Amazonía», plantea elementos para un desarrollo sostenible y descentralizado en la Amazonía Peruana. Identifica el paisaje forestal como su principal activo, pero la deforestación es el problema central, causada por actividades como la agricultura, ganadería y minería aluvial. Postula que es posible lograr una producción sostenible que mejore la eficiencia del uso del suelo, reduzca la presión sobre los bosques primarios y eleve la calidad de vida de la población.
Se enmarca en compromisos nacionales e internacionales como la preparación del Perú para ingresar a la OCDE, la Declaración Conjunta de Intención (DCI) con Noruega y Alemania (2014-2020) y la ratificación del Acuerdo de París. También considera la Declaración de Rio Branco y el Under2MOU suscritos por regiones amazónicas. Una Comisión Multisectorial e Intergubernamental, creada en 2018, elaboró diagnósticos que son base para este documento.
La propuesta busca una visión compartida de una Amazonía Peruana multi-jurisdiccional, sostenible e inclusiva. Sus elementos clave incluyen el alineamiento de políticas públicas, garantizar los derechos sobre la tierra, promover modelos de negocios y cadenas de valor sostenibles, impulsar la descentralización fiscal, involucrar a los pueblos indígenas, desarrollar ciudades sostenibles y asegurar gobiernos íntegros con acceso universal a servicios básicos.